El todavía presidente del Nuevo Instituto Estatal Electoral Guerrerense (IEEG), antes de que termine su tiempo en esa Institución no debe dejar hilos sueltos ni flancos abiertos al conflicto jurídico o político. Tiene hasta los últimos días de mayo la oportunidad de limpiar su gravísima imagen ante la opinión pública y dotar de legitimidad a la reciente reforma electoral en su conjunto.
Pero no solamente eso, sino que tiene pendiente un juicio laboral que interpusieron los trabajadores: Evodio Neri Zavaleta (15 de junio, 1999); María de la Luz Sánchez Martínez (01 de abril, 2002); y Michelle E. Rodríguez Méndez (01 de agosto, 1998); quienes laboraron en forma ininterrumpida trabajaron hasta el 31 de diciembre de 2005, quienes a su juicio desempañaron sus funciones con un sentido de responsabilidad.
Sin embargo, el 2 de enero de 2005, al regresar de vacaciones, se presentaron a trabajar en el anterior Consejo Estatal Electoral, pero se encontraron con la desagradable sorpresa de que su relación laboral había concluido, información que les dio Vicente Guerrero Campos, secretario técnico, por instrucciones de Emiliano Lozano Cruz; violando así sus más elementales derechos que les confieren nuestras leyes.
No era un lance cualquiera, válgase la obviedad, como degradación facciosa de un presidente del anterior CEE, quien entró por la puerta de atrás, como lo dio a conocer en una serie de reportajes televisivos Víctor Trujillo, y en lugar de lavar su imagen, la ha complicado porque pretende heredarle el conflicto laboral al próximo presidente del nuevo IEEG.
En varias ocasiones, dice un escrito que fue entregado a los diputados que integran la Comisión de Gobierno del H. Congreso del Estado, por los trabajadores afectados, por cierto uno de ellos (Evodio Neri Zavaleta, es un excelente abogado, conocedor de nuestras leyes electorales, además de eficiente, me supongo que sus ex compañeros también reúnen este perfil), en el que le solicitan su intervención, ya que el consejero presidente del IEEG, afortunadamente ya de salida, nunca los quiso escuchar a pesar de que también “estudió” Derecho, y que se supone que conoce la garantía de audiencia que enmarca nuestra Constitución Política de los Estados Mexicanos; el “pretexto” para no recibirlos, fue que sus puestos ya estaban ocupados por otras personas recomendadas por los otros 8 consejeros y que al anterior CEE le harían una reestructuración; cosa que nunca ocurrió desde enero de 2005, sino hasta diciembre de 2007, en que el CEE ahora recibe el nombre de Instituto en lugar de Consejo, y que ahora serán sólo 7 consejeros en lugar de 9, es decir, se tardaron 2 años para la supuesta reestructuración.
Los trabajadores injustamente despedidos por el saliente consejero presidente del IEEG (a quien las plumas oficiosas le llaman “doctor” en derecho electoral, por cierto uno de los 9 consejeros descubrió en fecha reciente una lista de columnistas pagados con el presupuesto del IEEG, para enaltecer con “virtudes” de las que carece totalmente el presidente del órgano electoral de la entidad), interpusieron su demanda laboral ante las instancias correspondientes, cuyo resultado ya fue emitido en forma favorable a los tres trabajadores, sin embargo, dice el escrito, que Emiliano Lozano Cruz ha estado retardando el procedimiento, interponiendo ante el organismo jurisdiccional electoral recursos totalmente improcedentes y frívolos, con la única intención de evitar el desarrollo del mismo, para que éste concluya su gestión y llevarse en costales el dinero que le corresponde a los tres trabajadores que les fueron violados sus derechos laborales.
La petición que hacen los tres trabajadores a los cinco diputados que integran la Comisión de Gobierno del H. Congreso del Estado, es saludable, sobre todo antes de que termine su periodo improrrogable Lozano Cruz, en el sentido de que acuden a esa Soberanía Popular para que intervenga en la solución de sus demandas y se les restituya en sus derechos laborales que les fueron violentados.
domingo, 2 de marzo de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario