En los considerandos que planteó la diputada María Guadalupe Pérez Urbina, en la tribuna del congreso del Estado, al presentar ayer jueves 12, un Acuerdo Parlamentario para exhortar al titular del poder ejecutivo local, para que aperciba a los responsables de la seguridad pública en la entidad, señaló:
Las libertades de expresión e información y sus derechos conexos constituyen instrumentos idóneos para preservar el Estado de Derecho y favorecer las prácticas democráticas, porque generan contrapesos frente al ejercicio del poder.
Seguidamente, la presidenta de la Comisión de Participación Ciudadana, recordó la intervención del martes 10, del diputado federal de su mismo partido Convergencia, Humberto López Lena Cruz, al rememorar que el pasado 18 de marzo la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), en Cartagena de Indias, Colombia, coincidiendo con el homenaje al escritor Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura y autor de la novela Cien Años de Soledad, publicó en un informe que los últimos seis meses han sido los peores por los que se refiere a los ataques a periodistas de México.
La legisladora del Partido Convergencia, señaló en el Ágora de Guerrero, que el periodismo es una profesión de muy alto riesgo en el país. Matar, desaparecer, agredir o amenazar a integrantes del gremio periodístico es una práctica recurrente, tanto que de acuerdo a la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), tan sólo después de Irak, el país más peligroso para ejercer el periodismo es México. Según su reporte del año pasado, 64 periodistas y ayudantes de los medios (conductores, traductores y personal técnico) fueron muertos en Irak; después sigue México, con 9 bajas; Filipinas, con 6, y Rusia, con 3.
Luego de lo general a lo particular, afirmó que los asesinatos anteriores sólo sirven de referencia, y desafortunadamente, para el gremio periodístico no son los únicos, ya que las agresiones y atentados a periodistas siguen creciendo, sin que a la fecha se haya podido resolver los delitos cometidos en el sexenio anterior, y en los ya 5 meses del actual sexenio calderonista. Hechos violentos a los que en esta ocasión se suma el asesinato del periodista Amado Ramírez Dillanes, corresponsal de Televisa en Acapulco, el pasado viernes 6 del presente mes.
Al comunicador Amado Ramírez Dillanes, le tocó la desdicha de ser el tercer periodista asesinado en este sexenio. Los otros dos anteriores fueron: Adolfo Sánchez Guzmán, también corresponsal de Televisa en Veracruz; y Raúl Marcial Pérez, editorialista de El Gráfico, de Oaxaca.
La sociedad guerrerense, enfatizó la diputada oriunda de la Costa Grande, no quiere que las autoridades encargadas de la procuración de justicia y aplicación de la ley, que le inventen “chivos expiatorios”. Que no basta con buscar que se esclarezcan los asesinatos y desapariciones de periodistas, se trata de que no existan más delitos contra los periodistas, como el caso de Ramírez Dillanes.
Al final de su intervención, la legisladora Pérez Urbina propuso el siguiente Acuerdo Parlamentario de urgente y obvia resolución:
Exhortó al Ejecutivo local, para que dé instrucciones a los responsables de la seguridad pública y la procuración de justicia, a que remitan los programas al Congreso del Estado, si es que existen, para la protección de los comunicadores de la entidad guerrerense. Asimismo, que gire instrucciones para que el secretario de Seguridad Pública del gobierno del Estado, se coordine con la Comisión de Seguridad Pública del Congreso del Estado, para que analicen los programas existentes, y en su defecto, se implementen programas viables para la seguridad pública de la ciudadanía, y en particular para la seguridad del ejercicio periodístico.
La propuesta del Acuerdo Parlamentario fue aprobada por unanimidad. Sólo después en el debate donde el diputado Ramiro Solorio Almazán venció al diputado zeferinista Fernando Donoso Pérez, este último, pretendió hacer un cuestionamiento a una parte del exhorto de la diputada Pérez Urbina en el sentido de que se estaba solicitando la protección para periodistas, la legisladora volvió a la tribuna para aclarar que era para la sociedad, pero en especial, al ejercicio del periodismo por considerar que es una profesión muy riesgosa. El legislador Donoso, desde su curul aceptó su error.
martes, 17 de abril de 2007
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