Difícil tarea la de redactar en unas cuantas líneas, una enorme biografía humana como la del filósofo francés Louis Althusser. Nació en Birmandreis, Argelia, el 16 de octubre de 1918, de familia alsaciana. Sus primeros estudios los hizo en Argel y, a los doce años, se establece en Francia. Estudia el bachillerato en Marsella y Lyon. En 1939 se inscribió en la Escuela Normal Superior de París (ENSP), pero la Segunda Guerra Mundial interrumpió sus estudios. Prisionero de los alemanes de Hitler, pasó cinco años en un campo de concentración nazi (Schieswig), terminada la SGM, concluye sus estudios en la ENSP, prepara su tesis sobre Hegel, posteriormente, a su alma Mater le daría un enorme prestigio como profesor de filosofía.
El pensamiento de Althusser fue diverso, tuvo una enorme influencia en la filosofía, la sociología, la historia, la comunicación, la antropología y la crítica literaria. En la década del 60 del siglo pasado, dos de sus obras: Para leer el Capital y la Filosofía como arma de la revolución, le dieron una enorme proyección en el campo del estructuralismo, situándose como uno de los más importantes filósofos entre la élite intelectual francesa.
Entre sus libros más importantes se pueden citar, además de los dos ya citados; el primero de sus libros fue Montesquieu: la política y la historia (1959); Ideología y Aparatos Ideológicos de Estado (1970); Curso de filosofía para científicos (1967); Lenin y la filosofía (1969); Para una crítica de la práctica teórica: Respuesta a John Lewis (1973); Elementos de autocrítica (1974) y Posiciones (1976), su último libro. Cada libro produjo un escándalo y controversias entre los intelectuales de su tiempo.
En 1980 asesinó a su esposa Hêléne estrangulándola, fue internado en un hospital psiquiátrico y encarcelado, donde recibió la visita de dos filósofos franceses muy famosos, Michael Foucault y Jacques Derrida. Althusser fue procesado, quedando en libertad porque tres especialistas dictaminaron que el filósofo había asesinado a su mujer en un acto de locura. Falleció el 22 de octubre de 1990, de insuficiencia cardíaca.
Origen del concepto de Estado
Antes de filosofar sobre los Aparatos Ideológicos de Estado, debemos conocer brevemente el concepto de Estado. En los Diálogos de Platón, se narra la estructura del Estado ideal, pero es Maquiavelo quien introdujo la palabra Estado en su célebre obra El Príncipe (1513): usando el término de la lengua italiana “Stato”, evolución de la palabra “Status” del idioma italiano.
Maquiavelo escribe en El Príncipe: “Los Estados y soberanías que han tenido y tienen autoridad sobre los hombres, fueron y son, o repúblicas o principados”.
Teoría Marxista del Estado
Lo esencial de la teoría marxista del Estado, desde que Marx desarrolló su teoría sobre el Estado en sus libros: El 18 Brumario de Luis Bonaparte y las Luchas de clases en Francia, Marx distinguió el aparato de Estado y el poder del Estado.
La distinción de Marx entre el poder de Estado y el aparato de Estado, es la parte esencial de la teoría marxista del Estado. El poder de Estado, es la toma y conservación del Estado. Toda la lucha de las clases gira alrededor del Estado. El aparato de Estado, es en la teoría de los clásicos del marxismo, el Aparato Represivo del Estado (ARE). El aparato de Estado después de las revoluciones puede seguir de pie, como sucedió en la revolución social de 1917 en la Rusia zarista, que encabezó Lenin, gran parte del aparato de Estado seguía de pie, hasta que Lenin lo destruyó totalmente. Otro ejemplo, fue el caso de la primera etapa de la revolución mexicana de 1910, don Francisco I. Madero dejó intacto el viejo aparato de Estado porfirista, y le costó la vida en manos de Victoriano Huerta en 1913.
Un resumen muy apretado de la teoría marxista del Estado sería: 1) el Estado es el aparato represivo del Estado; 2) se debe distinguir entre poder de Estado y el aparato de Estado; 3) el objetivo de la lucha de clases concierne al poder de Estado y, en consecuencia, a la utilización del aparato de Estado y 4) el proletariado debe tomar el poder de Estado completamente diferente, proletario, y elaborar en las etapas posteriores un proceso radical, el de la destrucción del Estado (fin del poder de Estado y de todo aparato de Estado).
Sin embargo, la teoría marxista del Estado, hasta aquí es descriptiva, por eso Althusser le agrega a la teoría de Marx, su teoría de los Aparatos Ideológicos de Estado.
Gramsci y el Estado
El referente teórico más cercano de Althusser en el análisis de la ideología, fue Antonio Gramsci, filósofo y crítico literario de Italia. Un marxista original, que no se concretó a repetir las ideas del marxismo clásico. Gramsci fue el primero en afirmar que el Estado no se reduce al Aparato Represivo del Estado (ARE), sino que comprende, cierto número de instituciones de la “sociedad civil”: las iglesias, las escuelas, los sindicatos, entre otras instituciones, desafortunadamente, el fundador del Partido Comunista Italiano (PCI), no le alcanzó su vida para sistematizar sus instituciones en los Cuadernos de la Cárcel, pues al salir de las cárceles del fascismo de Mussolini, muere en 1937.
Para poder realizar una aproximación a la sociedad capitalista más ajustada a lo que ésta es en realidad, Gramsci, acude a un concepto: el “Bloque Histórico”, es decir, la unidad de la estructura y la superestructura, la economía, la política y la cultura.
Gramsci desarrolla un sencillo esquema para decir qué es el Estado: sociedad política+sociedad civil=Estado.
Los aparatos ideológicos de Estado
Para avanzar la teoría de Estado, Althusser señala que no basta la distinción poder de Estado y aparato de Estado, sino también otra realidad que se manifiesta junto al ARE, pero que no debe confundirse con éste, lo que el filósofo le llamó Aparato Ideológico de Estado (AIE).
Althusser recomienda no confundir el Aparato Represivo del Estado con los Aparatos Ideológicos del Estado.
La teoría marxista señala que el Aparato de Estado (AE), comprende: el gobierno, la administración, el ejército, la policía, los tribunales, las prisiones, el derecho, etc., lo que ahora se llama Aparato Represivo del Estado (ARE), el cual funciona mediante la violencia.
Los Aparatos Ideológicos de Estado, escribe Althusser, son realidades, formadas por instituciones distintas y especialidades como son:
AIE religiosos (el sistema de las distintas iglesias).
AIE escolar (el sistema de las distintas “escuelas”, públicas y privadas).
AIE familiar
AIE jurídico
AIE político (el sistema político del cual forman parte los distintos partidos).
AIE sindical
AIE de información (prensa, radio, TV, etc.)
AIE cultural (literatura, artes, deportes, etc.)
Althusser señala algunas diferencias entre el ARE y los AIE, el primero es unificado, proviene del dominio público y funciona mediante la violencia. Los segundos son dispersos, plurales y provienen en su mayoría del dominio privado ( iglesias, familia, periódicos, partidos políticos, etc.). Althusser advierte que no hay ARE ni AIE puramente represivos ni ideológicos; hay un doble funcionamiento, según sea el aparato, puede funcionar predominantemente con represión o con ideología, por ejemplo, la escuela y las iglesias, “adiestran” con métodos apropiados (sanciones, exclusiones, selección, etc.) no sólo a sus oficiantes sino a su grey.
Resumen de la teoría del ARE y los AIE, según Althusser:
1) Todos los aparatos de Estado funcionan mediante la represión y la ideología, con la diferencia de que el aparato (represivo) de Estado funciona masivamente con la represión como forma predominante, en tanto que los aparatos ideológicos de Estado funcionan masivamente con la ideología como forma predominante.
2) En tanto que el aparato (represivo) de Estado constituye un todo organizado cuyos diferentes miembros están centralizados bajo una unidad de mando –la de la política de lucha de clases aplicada por los representantes políticos de las clases dominantes que tiene el poder del Estado- los aparatos ideológicos de Estado son múltiples, distintos, “relativamente autónomos” y susceptibles de ofrecer un campo objetivo a contradicciones que, bajo formas unas veces limitadas, otras extremas, expresan los efectos de los choques entre la lucha de clases capitalista y la lucha de clases proletaria, así como sus formas subordinadas.
3) En tanto que la unidad del aparato (represivo) de Estado está asegurada por su organización centralizada y unificada bajo la dirección de representantes de las clases en el poder, que ejecutan la política de lucha de clases en el poder, la unidad entre los diferentes aparatos ideológicos de Estado está asegurada, muy a menudo en formas contradictorias, por la ideología dominante, la de clase dominante.
Todos los Aparatos Ideológicos de Estado, sean cuales fueren, concurren al mismo resultado, la reproducción de las relaciones de producción, es decir, las relaciones capitalistas de explotación, cada uno de ellos concurren a ese resultado único de la manera de que le es propia.
Finalmente, la expresión “ideología” fue fundada por Cabanis, Destutt de Tracy y sus amigos, quienes le asignaron por objeto la teoría genética de las ideas. Marx y Engels retomaron el concepto de ideología, 50 años después en una sus obras de juventud, en el libro “Ideología alemana” (1845-1848), y le dieron un sentido distinto, es decir, las ideologías, no son simples ideas.
Por esta razón los AIE no son realizaciones de la ideología general, ni tampoco la realización sin conflictos de la ideología dominante. La ideología de la clase dominante no se convierte en dominante por gracia divina, ni en virtud de la simple toma del poder de Estado. Esta ideología es realizada, construida, y se convierte en dominante con la puesta en marcha de los AIE. Esta puesta en marcha no se hace sola, por el contrario, es objeto de una continua y muy dura lucha de clases: primero contras las antiguas clases dominantes y sus posiciones en los viejos y nuevos AIE, después contra la clase explotada.
Si es verdad que los AIE representan la toma en la cual la ideología de la clase dominante debe necesariamente medirse y enfrentarse, las ideologías no “nacen” en los AIE sino que son de las clases sociales tomadas en la lucha de clases de sus condiciones de existencia de sus prácticas, de su experiencia de lucha.
Como afirma Miriam Limoeiro Cardoso, socióloga brasileña, en su libro “La Ideología Dominante”, la ideología es una de las formas por las cuales las clases dominantes ejercen su poder sobre las clases subalternas.
Mi preocupación como oriundo de una entidad suriana como Guerrero, subdesarrollada, explotada, con alta inseguridad pública y sin empleos; con un grupo político mafioso y corrupto en el poder que se dice de “izquierda” y “socialista”; en realidad es ajeno a lo que dice ser, es un gobierno con una ideología dominante de la derecha del caviar, que cada vez más profundiza las desigualdades sociales, sin que haya una ligera esperanza de que haya equidad y justicia social.
eodiego@yahoo.com.mx
1 comentario:
Gracias a ti ya entendí
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